El jueves 30 de mayo, Corea del Norte anunció un brote de peste porcina en una granja en la provincia norteña de Jagang, en la frontera con China, a la Organización Mundial de Sanidad Animal.
Esto llevó a Corea del Sur a tomar medidas contra la posible propagación de enfermedades animales en áreas fronterizas con el Norte.
A pesar de que esta granja de Corea del Norte se encuentra lejos de la frontera, el Ministerio de Agricultura de Corea del Sur anunció el viernes 31 de mayo que haría todo lo posible para llevar a cabo las medidas de cuarentena, ya que esta enfermedad es "muy probable" que golpee al Sur.
Según el Ministerio de Agricultura de Seúl, de los 99 cerdos en la granja norcoreana, 77 murieron de fiebre y el resto fueron asesinados por las autoridades norcoreanas.
Corea del Sur sigue desconfiando de la posible propagación de la enfermedad desde Corea del Norte a través de cerdos salvajes que pueden cruzar la frontera.
"Ya estamos trabajando en estrecha colaboración con organizaciones relevantes para hacer frente a un posible brote de peste porcina en Corea del Norte y fortalecer las medidas de cuarentena en las zonas fronterizas", dijo el Ministerio de Agricultura de la República de Corea.
Según el ministerio, cerca de 350 granjas surcoreanas ubicadas cerca de la frontera son monitoreadas de cerca. Después de un brote en el norte, el ministerio planea realizar análisis de sangre de cerdo en granjas, cuyos resultados deberían obtenerse antes del 7 de junio.